sábado, 1 de noviembre de 2025

Garayoa vs Mañeru

Quería comenzar esta crónica resaltando que por fin se ha resuelto el enigma de la tierra batida desaparecida todo estos años de las pistas del club; los ladrones, disfrazados de operarios, y con varios camiones de alto tonelaje, la pusieron toda de golpe en la pista 3. Esto debió coincidir en el tiempo con el inicio del arreglo de dicha pista 3. Los de mantenimiento, dado que era la primera vez que pisaban esa pista desde su última reforma allá por los años 70, debieron pensar que esa playa de arena depositada allí era lo normal, y la esparcieron por la pista según la regla del “libre albedrío”, eso sí, logrando un nuevo récord del mundo; 16 segundos y 7 décimas. 

Como consecuencia de este veloz montaje, la pista 3 tenía un asombroso parecido al campo de fútbol del Oberena de los años 80, conocido como el patatal. Y así nos la encontramos Javier y yo el Martes, día del partido. Antes de iniciar el peloteo, hubo que rascar un buen rato en los fondos para que la línea de saque aflorara a la superficie. El resto de la pista se asemejaba a un campo de dunas, donde adivinar hacia dónde iba ir el bote era tarea quasi-imposible. 

En estas condiciones, lo principal era adaptarse lo antes posible al bote, rezar mucho, y mantener la calma ante semejante irregularidad. Y aquí JP jugaba con ventaja, ya que lleva muchos años adaptándose a las direcciones variables e imprevisibles de la bola (léase en el saque) y no le costó mucho hacerse al bote loco de la bola. Si además a esto le sumamos que en los 7 ó 8 puntos de juego que tuvo Javier en el partido, la suerte no le acompañó con los botes, el resultado fue 6-0 a favor de JP, resultado totalmente anómalo y que no muestra la igualdad que hay entre ambos jugadores. 

Espero que la próxima vez que juguemos sea en una pista en condiciones. Seguro que será un partido muy igualado, como lo es nuestro nivel.


Crónica escrita por JP Garayoa 




No hay comentarios:

Publicar un comentario